- ¡Dedicado a nuestros muertos, a los devastados y graduados!
Muchos se graduaron durante el pasado fin de semana en el Hell and Heaven Open Air 2023. Miles de veinteañeros y treintones se dieron cita los tres días que duró el encuentro anual internacional de metal más importante que se haga en Hispanoamérica, pese, entre otras cosas, a las múltiples deficiencias en organización, logística con largas filas, sobre todo para acreditarse y entrar un martirio; cancelación de bandas de mediano y buen nivel; cambios repentinos, entre ellos, el del precio de los boletos hasta quedar en 500 pesos por día, ¡una ganga para todo lo que se ve!, pero mal para los que pagaron un dineral desde el principio y no tenían privilegios; la falta de servicios de calidad en la zona VIP; falta de buena señal de internet, debido a la despejada y ventarrona zona cercana al Aeropuerto Internacional de Toluca; así como el clima pre invernal extremo, y finalmente, alimentos y bebidas inaccesibles al bolsillo mexicano.
Los jóvenes disfrutaron de las bandas como si se tratase de nosotros cuando teníamos su edad hace casi tres décadas. Miles de féminas alborotadas por Axel Rose, en su último concierto de Guns N´Roses en esta gira internacional que pisó Toluca, México, como si se tratase de un rockstar en sus mejores días; igual sucedió con Billy Idol, con quienes la multiculturalidad generacional presente nos dio por cantar a todo lo que dan pulmones y garganta a dos mil 600 metros sobre el nivel del mar, frente al volcán Xinantécatl, Nevado de Toluca, como bailotear lo más se pudiera en el rapado césped del Foro Pegaso de Toluca, para no lastimar tobillo y cadera alguna.
De todo lo que este interlocutor tuvo oportunidad de ver, citamos: el primer día, el viernes 3: In Flames, Suicidal Tendencies, Sick of it All, The Casualties, Atoxxxico, Asphyx e Incantation.
Para el sábado 4 tocó turno a London After Midnight, Ministry, Sodom, Lacrimosa y Muse.
Finalmente, el domingo 5 de noviembre vimos a Guns N’ Roses, Billy Idol, Biohazard y Rata Blanca. 15 bandas en total en tres días, en jornadas de ocho horas por día (17:00-01:00), es decir, 24 horas de música continua, un día completo sin parar haciendo lo que uno más ama en términos laborales, y para lo que estamos hechos, pese a mentar madres con los más cercanos colaboradores por falta de condiciones laborales óptimas, hambre, falta de capital para invertir en estos gustos-hábitos y la lista de anomalías mencionadas, a la que le agregamos un negociado estacionamiento de tres días, pero a media hora de caminata del acceso principal del Foro Pegaso.
Vivimos tres días como en aquellos pasionales momentos intergeneracionales en los que el tutor, guía, pareja sentimental y asesor académico emocional, enseña todo lo que puede y está a su alcance al futuro profesionista, con la cómplice amorosa discreción, esa prima hermana de todo lo que se mueve por debajo del agua en la cada vez menos contestataria sociología humana, en la desgastada ciencia política, en el progresivo estudio del arte en todas sus manifestaciones, para lograr el cometido, la misión, la ilusión, el sueño cumplido tras tantos contratiempos: graduarse en todo en algún momento, algún día en algún lugar.
Fue grato ver húmedos ojos juveniles en los momentos indicados en las tres veladas, en la que se festejaron añejos temas radiables, comerciales, pero muy buenos que marcaron un antes y después en la música del orbe en el siglo XX, justo cuando nos tocó vivirlos en su momento histórico, en la cúspide de su fama, y que no sólo fueron dignos acompañantes de música de fondo de variados encuentros amorosos, sino que ahora nos representan a cabalidad.
Para su #ServibaryAmigo #DandyperoPunk #ElCinicoMayor, esto fue lo más rescatable del Hell and Heaven Open Air 2023, más allá del tremendo enojo de los metaleros ortodoxos que desean que las bandas más extremas y raras sobre la tierra estuviera a su servicio y capricho en las programaciones, olvidando que esto es ante todo un negocio redondo, al que no se le debe perder.
Rumbo a mi #53renacimiento, el lunes 20 de noviembre, agradezco haber tenido la oportunidad de estar en el Hell and Heaven Open Air 2023, porque no estaba seguro de asistir por diversas razones. Se lo brindo a los que no pudieron estar ahí conmigo, aun deseándolo; a mis muertos, nuestros muertos, a quienes festejé la semana pasada; a todos los que fallecieron antes de poder asistir a su último encuentro musical. También a los que fallecieron en Acapulco, Guerrero, por el histórico devastador Huracán Otis, y por todo lo que se deba hacer para resolver terrible situación. Finalmente, a todos aquellos mexiquenses que no asistieron al festival porque estaban preparándose para graduarse y había que hacer el sacrificio a toda costa. Para aquellos que deseando estar, prefirieron enlistarse para brindar ayuda en Guerrero.
Vida, entramos en la magia del infinito ocho, en la danza numérica del décimo primer mes del año, con los minutos y segundo exactos, cual Muerte en acecho constante, motivando a vivir al máximo cada instante. Recibo la noticia del cambio de hogar tras exactos cuatro años (la mitad del infinito ocho) de vivir una existencia inigualable en este loft de adobe metepequense, en el Bunker Morriña, embajada, clínica fisiológica mental, como de rehabilitación existencial en plena pandemia; sex shop, guarida con asilo político y amorosa casa como singular único hogar en Metepec, en el que compartí los mejores momentos de mi reciente etapa tras la rehabilitación del corto circuito neurológico. Se termina un ciclo, como en todo, y empezaremos el cambio requerido que exige la existencia.
Vida, amore mío, amor propio en espejo de fina talabartería, entramos con la frente en alto por la puerta que recién abrimos hacia el futuro inmediato. Decretado está continuar sendero pactado para seguir creciendo en esta oportunidad llamada existencia, para continuar recibiendo los regalos y premios que nos brinda nuestro paso por esta Tierra. Si la vida nos permite, nos vemos en el Hell and Heaven Open Air 2024, para ver a Iron Maiden como el grupo estelar del próximo año.
Para nuestros seguidores que no pudieron estar, les compartimos estas imágenes y videos con fragmentos de las presentaciones de las bandas mencionadas que tuvimos oportunidad de reseñar. Agradezco a mis compañeros de aventura de tres días: a mi carnite Giovanni Gomez Tagle Flores, a la bella Yizelle Maf y al gran camarada Emmanuel Guerrero Mejía. Los tres estuvieron pendientes en todo momento de lo que se requiriera. También aplaudo el entusiasmo, interés y sus aportaciones de la afable y atractiva Stephanie Miranda Rodríguez, quien se sumó de último momento. Entre todos logramos sacar adelante el compromiso para Mas Latino TV, los portales de Soy Música y Cultura y Semanario Punto Estado de México.
Viernes 3 de noviembre
Sábado 4 de noviembre:
Domingo 5 de noviembre:
