Silencios Estereofónicos

El sonido gótico de The Cranes, menos pop dark

SILENCIOS ESTEREOFÓNICOS

En otra entrega de la compilación de columnas, entrevistas y reportajes para un libro digital e impreso, el periodista Félix Morriña, publicó con fotografía de Atonatiuh S. Bracho en la sección de Cultura de Milenio Diario, el miércoles 1 de marzo del 2000, la entrevista con el grupo inglés The Cranes, ese mismo que le abrió a The Cure durante su primera gira por México, cuando tocó en el estadio de los Tigres de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) en 1992, en memorable concierto. Las demás imágenes del grupo son de la Internet.

Félix Morriña

  • El cuarteto, representante de la corriente del gótico inglés de finales de los ochenta, regresa a México con un sonido más taimado, menos denso y oscuro, a decir de sus líderes Jim y Alison Shaw.

El cuarteto inglés The Cranes visita México por cuarta ocasión para promocionar su nueva producción “It’s a Beautiful World”, la cual saldrá a mediados de año bajo su propia producción y sin una disquera transnacional que los respalde. “Se trata de no perder nuestra identidad musical, ya que las casas discográficas internacionales tienden a desvirtuar el trabajo de grupo”, explica en entrevista la esbelta cantante Alison Shaw.

Su anterior presentación en México fue en septiembre de 1997, en el Museo del Chopo. Alison y su hermano, el tecladista, guitarrista y compositor Jim Shaw, han incorporado al grupo a dos nuevos integrantes: el guitarrista Paul Smith y el baterista John Calender, quienes se integraron tras la salida de Manu Ross y Mark Francombe. “Ellos están muy compenetrados con el trabajo del grupo, puesto que han seguido la trayectoria de The Cranes. John Calender grabó sólo parte del disco”.

—¿Por qué titular un disco “It’s a Beautiful World”, cuando The Cranes es, por definición, obsesivamente oscuro, onírico y vivencial?

Alison: Hemos cambiado mucho desde el álbum anterior “Population Four”, grabado hace cinco años. Ahora nuestra perspectiva es distinta y mucho menos oscura. Vemos al mundo muy bonito, bueno, al menos en algunas partes de Europa.

—Se tardaron mucho en grabar el disco que saldrá en el verano, ¿por qué hacer una gira antes y no después?

Alison: Nos urgía comenzar una gira internacional. Estuve 18 meses sin actividad musical durante los cuales me dediqué a estudiar teatro dramático en Inglaterra. Mi hermano se dedicó a componer y a hacer cosas muy personales. Llegaron oportunidades de creación: participar en una película como actores y componer la banda sonora de otra cinta. Tenemos contacto con dos directores: Chris Soldo, asistente de producción de Brian de Palma, y Dean Debbi, de la Disney, dos casos distintos y aislados. Ojalá se concreten los dos proyectos.

—¿Qué nuevas instrumentaciones han sido incluidas en el disco, es diferente del resto de sus producciones?

Jim: Contendrá 10 ó 12 canciones, se usaron más samplers (programadores), algunas flautas transversales y muchos arreglos de guitarra acústica. Es mucho menos pop dark, categoría en la que nos han clasificado, es menos denso y oscuro. No se parece en nada a “Loved, Wings of Joy” y “Forever”.

—Dentro del imaginario en el que The Cranes crea su música, ¿escuchas algo que los obligue a atender su proceso creativo?

Alison: Estamos muy influidos por el lugar en el que vivimos (Portsmouth, Inglaterra), aunque siempre he preferido incluir algo distinto, música brasileña por ejemplo, me gusta Antonio Carlos Jobim, A. Gilberto.

En el disco anterior, “Population Four”, incluimos una canción llamada ‘Brazil’ que es un intento por ir más allá de nuestra cultura sajona. La canción tiene una característica muy especial en cuanto a eso denominado imaginario colectivo. Tiene esa peculiaridad en el formato y estructura lírica. Pretendemos que se escuche muy brasileña, con tambores y todo lo percutivo que debe llevar una canción de este estilo, creo que lo logramos para ser ingleses.

—Alison, háblanos de la naturaleza de tu voz, ¿has tomado clases de canto?, ¿cómo la ejercitas al momento de actuar y cuando estás en el estudio?

Alison: Desde hace dos años he tomado clases de canto en la escuela de teatro, porque anteriormente sólo realizaba ejercicios de calentamiento. Mi voz, es natural, es poco común dentro de las cantantes de este estilo. Me sale así y por eso suena plañidera. Antes de subir al escenario hago ejercicios de respiración y caliento la voz, cuando estoy en el estudio tengo más tiempo y me ayudo de los programadores, allí es mucho más fácil.

—Los críticos consideran que su disco “Loved” es el más introspectivo, el más denso, tanto por sus estructuras musicales como a nivel de texto.

Jim: Yo quiero mucho ese disco, a decir verdad, es el que más me ha gustado, pero el reciente me exige bastante tiempo y cariño. “Loved” no es el más denso e introspectivo, es todo lo contrario, es alegre y festivo.

—Cómo ha sido The Cranes a lo largo de 12 años de trayectoria artística, ¿cuál sería el balance?

Jim: Es algo muy complejo. Sin el apoyo de las disqueras grandes puedo decir que ha sido benéfico, pero en cuanto a proyección y penetración nos ha faltado apoyo. La industria independiente hace un trabajo muy digno y eficiente, pero no podemos exigirles más si las grandes compañías obstruyen la labor de difusión.

Cuando empezamos éramos muy ingenuos y no sabíamos apreciar el valor de las oportunidades, desperdiciamos viajes, producciones. La industria de la música nos abrió los ojos y nos ha obligado y nos ha obligado a sobrevivir, además nos sorprendió el fisco inglés que cobra muy altos impuestos y nos desfalcó prácticamente todas nuestras ganancias. En términos generales no podemos quejarnos.

EL CUARTETO INGLÉS

The Cranes se formó en 1988 con la dirección de los hermanos Alison y Jim Shaw. En los inicios de su carrera grabaron dos discos que no han sido reeditados en disco compacto: “Self not Self” y “Fuse”. Su primera obra ampliamente difundida es “Wings of Joy” (1991), le siguen “Forever” (1992), “Loved” (1994), “Population Four” (1996), la banda sonora de “Scarborough Ahey”, de Tania Diez, la cual ganó un Oscar y, la grabación con edición limitada de “The Tragedy of Orestes and Elecktra”, una parodia de música para cine basada en la obra “Las moscas”, de Jean Paul Sartre.

Integrantes: Los hermanos Shaw, John Calender y Paul Smith.

Influencias: This Mortal Coil, Dead Can Dance, Sisters of Mercy, The Cure, entre otros.

Internacionalización: Durante el “Wish Tour” de los británicos The Cure, el cantante y líder de esta banda, Robert Smith, invitó a The Cranes para que abrieran la gira.

Conciertos en México: Han venido en tres ocasiones, la primera con The Cure en el estadio de la UANL el 16 de junio de 1992; la segunda hicieron una breve gira por varios foros de la Ciudad de México (La Diabla y el desaparecido PH) y una presentación en el Roxy de Guadalajara (1995); la tercera tocaron en el Museo del Chopo del DF (hoy #CDMX en 1997). En su cuarta visita sólo harán un concierto el viernes 3 de marzo, Hard Rock Live, de Polanco, 21:00.

The Cranes y este interlocutor les recuerda: ¡Nos buscamos, nos vemos, nos escuchamos, nos entendemos!

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